martes, 27 de noviembre de 2012

Traductores de libros,

"los héroes al final del día"


26/11/12

La escritora finlandesa Anja Snellman destacó en la FIL la labor de traducción "para que las obras sean leídas en diferentes naciones del mundo"

 
La escritora finlandesa Anja Snellman resaltó hoy el trabajo de los traductores de libros, "quienes son los héroes al final del día, para que las obras sean leídas en diferentes naciones del mundo", dijo.
 
En el marco de la Feria Internacional del Libro (FIL) Guadalajara, agregó que en Finlandia los traductores "se encuentran frente a un obstáculo porque los contratos no les ayudan, reciben muy poco euros, mientras que a lo mejor el escritor recibe 10 veces más, por eso muchos prefieren escribir que traducir". 

Indicó que tiene 22 novelas traducidas en 21 idiomas hasta el momento y "Las chicas de la tienda de mascotas" es la primera de ellas que es traducida al español.

Expresó que fue bastante complejo para un escritor finlandés poder encontrar traducción para el español, "y me sorprendió que se decidiera por este texto en especial, el cual habla de una jovencitas de unos 14 años que están involucradas por medio de Internet al negocio del sexo".

Agregó que en la historia de su libro, una de las chicas "es secuestrada, puesta como tráfico de blancas y trasladada a un país muy parecido".

Destacó que se tradujo al español y al italiano esta novela en especial porque "es la tendencia feminista que quiero representar, la sexualidad de las jóvenes y las pautas que conllevan a nivel global el tráfico sexual, entre otros temas".

Refirió que su próximo libro será publicado el próximo año en italiano "y espero que de igual forma sea traducido al español".

Lamentó que en Finlandia año tras año "se publican más y más libros pero la gente lee menos y compra menos, tenemos estos contrastes que se ven como una tendencia marcada, dependemos del mercado pero queremos que la gente quiera leer y ese es nuestro reto".

"No creo que los libros electrónicos tengan injerencia directa en esta situación, sino el hecho de que hay basura masiva publicada en todos lados del mundo, y ese es el problema", dijo.

Señaló que tiene la idea de escribir en específico un libro digitalizado, "con fotografía móvil, y con tecnología que pueda combinar novela con ficción, sería como un multilibro".

Detalló que hay varias formas de trabajar en un libro, "una persona está dentro de mi mente en un modo esquizofrénico, e intento descifrar quien es, que pretende, y así fluye, crece dentro de mí, al personaje lo voy desarrollando, es como magia que sucede, y se plasma en escritura en una rutina diaria".

"En mis libros plasmo las influencias de las culturas en que he vivido a lo largo de mi vida, de las vivencias de las distintas generaciones familiares, de mis antepasados, todo esto ha tenido que ver con mi escritura", expuso.

Anja Snellman es muy conocida en Finlandia por sus novelas, y aclamadas por la crítica, y en las que desarrolla un interesante desarrollo psicológico, con grandes dosis autobiográficas.

Varias de sus novelas se han llevado al cine y también ha participado en guiones de cine, de gran éxito en su país, pertenece a la vanguardia de la literatura contemporánea de Europa del Norte, y es una de los autores más leídos de su generación en Finlandia.

Snellman nació en Helsinki en 1954, hija de dos inmigrantes carelianos quienes nunca superaron la pérdida de su casa en la Unión Soviética.

Los libros de Snellman suelen causar mucha discusión, con su habilidad extraordinaria de percibir y expresar los temas de trasfondo de la sociedad.


FUENTE:
http://www.eluniversal.com.mx/notas/885750.html

lunes, 26 de noviembre de 2012

  La profesión ya no llora... tanto

 

26/11/12

El esfuerzo de los traductores logra que se materialicen viejas reivindicaciones, pero sus nombres vuelven a desaparecer de las cubiertas y de muchas menciones.


  



Los traductores literarios españoles han pasado, en medio siglo, del “traducir en España es llorar” al “traducir en España es una profesión”. Lo dice Francisco Uriz (Zaragoza, 1932), que después de medio siglo en el oficio (traduciendo del sueco, sobre todo poesía, y a veces las frases que la Academia Sueca emite para dar a conocer su estimación de los Nobel literarios), acaba de recibir del Ministerio de Cultura el Premio Nacional a la Obra de un Traductor.

Su colega, Luz Gómez (Madrid, 1967), también ha sido premiada, en su caso con el Premio Nacional a la Mejor Traducción (ambos dotados con 20.000 euros), por haber puesto en castellano En presencia de la ausencia, del árabe Mahmud Darwix (Pre-Textos), a quien lleva traduciendo 15 años. Ella cree que, en el campo de esas reivindicaciones de los traductores españoles, “quedan batallas por ganar”.

Según Gómez, “el traductor literario no deja de ser una molestia imprescindible, y como tal no se sabe qué hacer con él”. Drástica: “Lo ideal sería”, dice, “que no existiera: es una carga, molesta pagarle, molesta reconocerle”.

En los años ochenta, por la insistencia de Esther Benítez, un mito en la traducción moderna, y de Javier Marías, ambos traductores, los editores se tomaron en serio esa reivindicación y desde entonces el traductor ha solido tener su lugar a la sombra (o a la luz) del autor. Pero Luz percibe que, “tras una época de reconocimiento tipográfico, su nombre ha empezado a desaparecer de las cubiertas de los libros, para que las cubiertas queden más limpias, dicen”.

“España posee una de las leyes de Propiedad Intelectual mejores y más avanzadas de Europa. Con lo cual, no debería haber cuestiones pendientes”, dice María Teresa Gallego Urrutia, la presidenta de ACE, la organización que agrupa a los traductores españoles. “Pero hete aquí”, añade, “que buena parte de las editoriales de este país —no todas, ni mucho menos, pero sí bastantes— incumplen la ley sistemáticamente (de aquí la frase que suele repetir Miguel Sáenz: ‘España es un estado de derecho atemperado por el estricto incumplimiento de la ley’). Por ello a veces los contratos de traducción, o sea de cesión de derechos para la explotación de la traducción durante un número determinado de años, son claramente ilegales (vulneran la letra de la ley) y, otras, no llegan a ser ilegales pero son abusivos (vulneran el espíritu de la ley)”.

Ya no lloran, dice Uriz. Pero tendrían motivos. Continúa la presidenta de los traductores: “A veces las editoriales no admiten negociación alguna” sobre anticipos y porcentajes en derechos. Y, además, se producen impagos “o retrasos abusivos” por parte de algunas editoriales, “no de todas, ni mucho menos”.

Pero hay razones para decir que los tiempos han avanzado para mejor. Dice Elisabeth Falomir (Valencia, 1988, traductora del francés): “Hay que batallar duro para que se hagan contratos de traducción dignos. ¡Y que se cumplan!”. Juan Sebastián Cárdenas (colombiano en Madrid, traductor del inglés, también es narrador) tiene claro su lugar en el mundo: “En términos estrictos, los traductores no somos distintos de un encofrador o del tipo que hace alicatado. Está bien que se valore nuestro trabajo, que es tremendamente complicado y a veces tan ingrato. Pero básicamente somos trabajadores de la industria cultural. Somos obreros. Y esa consciencia de obreros viene con una lista de derechos que todavía estamos en proceso de garantizar plenamente”.

En ese plano, Cárdenas apunta a la cabeza: “En nuestros tiempos, el peor enemigo del traductor —siempre que no hablemos de un tipo mediocre y chapucero, siempre y cuando hablemos de un buen traductor— es el colegueo y la informalidad con la que muchos editores entablan las relaciones laborales. A lo largo de estos 10 años de experiencia me he topado con un puñado de listos, grandes y pequeños, dispuestos a timar a quien fuera”. Pero él tiene la suerte, dice, de trabajar con gente magnífica “como Enrique Redel (Impedimenta) o Diego Moreno (Nórdica)”.

A Uriz le pregunto por sus traducciones más preciadas. Va por épocas. “Cuando traducía con Artur Lundkvist literatura latinoamericana al sueco, me identifiqué sobre todo con César Vallejo, Pablo Neruda, Jaime Gil de Biedma y Blas de Otero… al español, me sentí hermanado con el finlandés Claes Andersson, el sueco Gunnar Ekelöf y ahora con el danés Henrik Nordbrandt, el finlandés Pentti Saarikoski. ¡Y no olvido a Tomas Tranströmer!”. Pero hay un poema del que no se puede olvidar: Sobre la guerra de Vietnam, de Goran Sonnevi, “que influyó en mí de una manera decisiva, tanto que me dio la pista para tratar en un poemario mi indignación por la barbarie norteamericana en Vietnam”.

Un traductor es un bicho raro, dice Luz Gómez. “Yo traduzco poesía pero escribo y enseño sobre islam e islamismo. Traduzco a partir de un proyecto que propongo a un editor y discutimos. Es el caso también de un buen número de poetas traductores o narradores traductores. Si no fuera por ciertos editores, siempre dispuestos a abrir el panorama, sería misión imposible”. A ella la llevó a traducir el gusto por la poesía árabe contemporánea, “en concreto la obra de Mahmud Darwix”, tarea que le ha proporcionado este premio.

Le pregunté a Cárdenas, autor también, qué se siente dándole voz a autores con los que no se experimenta identificación. Responde: “Siguiendo muy de cerca las reflexiones de Walter Benjamin sobre la traducción, creo que la mayor dificultad técnica del trabajo radica en la obligación de trasladar los efectos sensoriales que produce la lengua original a un texto determinado. La traducción crea efectos inesperados en la lengua de recepción, y por tanto, en la percepción, en el cuerpo del lector. Y ese trabajo de mediación pasa, en el sentido más literal, por el cuerpo del traductor. Podemos imaginárnoslo como una especie de máquina o antena, que recibe señales y las transforma en otra cosa”. Elisabeth Falomir: “He traducido voces narrativas casi siempre masculinas y creo haber conseguido amoldarme a distintos registros. Intento hacerme invisible, que no se me oiga: traducir es convertirse en ninja, dejarse atravesar por el texto y entregarlo sin dejar mucha huella, mimetizarse”.

Gallego Urrutia, que acaba de publicar su traducción de Orígenes y Los desorientados, de Amin Maalouf (Alianza), dice qué le dejan los autores: “Una embriaguez…”. Lo explicó en un artículo en El Trujamán, la revista de traducción del Instituto Cervantes: “De repente, esas pocas palabras, esas pocas frases, breves pero fundamentales y eternas, son mías. Las poseo y me poseen”.

El orgullo del traductor literario, dice, “reside en su capacidad y su talento para enfrentarse a la traducción de cuantos escritores les encomienden las editoriales. Su versatilidad es su grandeza”. Por eso su exigencia de buen trato es una reivindicación que parece inacabable. Uriz lo explica: “Siempre hay que seguir reclamando un pago por página que lleve nuestros honorarios al nivel de lo que cobra la señora de la limpieza”.

Ya no lloran… tanto; quieren ser invisibles y son ecos necesarios de los autores extranjeros. Quieren volver a las cubiertas y quieren que su salario compense el esfuerzo de ser imprescindibles.


FUENTE:
http://cultura.elpais.com/cultura/2012/11/25/actualidad/1353867116_706887.html
 El Redescubrimiento

 

El premio Roger Caillois que acaba de recibir Juan Gabriel Vásquez confirma el buen momento de la literatura colombiana en Europa. Hoy no es raro que autores nacionales sean traducidos para los lectores del viejo continente.



V�squez, de 39 a�os, estudi� Derecho en su Rosario Natal y posteriormente literatura francesa en la


Hace dos semanas en el Instituto Cervantes en Dublín se lanzó la novela El ruido de las cosas al caer de Juan Gabriel Vásquez, o The Sound of Things Falling, como fue traducida al inglés. A los pocos días se supo que Vásquez había ganado el premio Roger Caillois, uno de los más relevantes otorgados en Francia a autores extranjeros, no solo por esa novela, publicada por la editorial Seuil a comienzos de año, sino por el conjunto de su obra conocida en Europa. En 2009 la editorial Bloomsbury UK había traducido Los Informantes y el año pasado Historia secreta de Costaguana.

En 2009 Los Informantes de Vásquez fue finalista del premio inglés Independent Foreign Fiction Prize. El ganador fue Evelio Rosero, el primer colombiano en ganar este importante galardón, por su novela Los ejércitos, traducida al inglés por Quercus Publishing en 2008. Los jurados definieron su historia sobre la vida en Colombia en medio del conflicto como "una novela de amor, guerra y duelo hermosamente elaborada y con un lenguaje suave". El año pasado tradujeron Los Almuerzos, otra obra de Rosero, catalogada por Maya Jaggi de The Guardian como "una sátira de la iglesia católica colombiana que incorpora humor, pathos y poder". Rosero ha sido traducido también al francés, alemán, portugués y varios idiomas escandinavos, entre otros.

Peter Schultze-Kraft, quien tradujo a Gabriel García Márquez al alemán, ha traducido seis libros de Tomás González desde 2005. La luz difícil, el más reciente, fue publicado en septiembre de este año y ha recibido muy buenas críticas. González fue el único escritor colombiano invitado este año a la Feria del libro de Fráncfort. En octubre de este año González y Schultze-Kraft se presentaron en varias ciudades de Alemania, Holanda, Francia y Suiza para promocionar sus novelas. Andreas Platthaus del diario alemán Frankfurter Allgemeine alabó Los caballitos del diablo de González en uno de sus artículos y escribió: "Este libro, sin dimensiones épicas algunas, tiene, sin embargo, un tono épico".

A finales de octubre, el bogotano Santiago Gamboa viajó a Londres donde lanzó la traducción de su novela Necrópolis. No es la primera vez que una de sus novelas sale en Europa. De hecho sus libros han sido traducidos al francés, alemán, italiano, checo, ruso, noruego, griego, danés, sueco y rumano, entre otros, pero nunca había sido traducido al inglés. Necrópolis ganó el premio de literatura La Otra Orilla en el 2009 y la versión en francés fue publicada en 2010. Los lectores galos conocen a Gamboa desde finales de los años noventa con la traducción de Perder es cuestión de método.

En octubre llegó a Francia ¡Que viva la música!, la icónica novela de Andrés Caicedo, publicada 35 años después del suicidio de su autor por ediciones Belfond, con traducción de Bernard Cohen. La novela conserva su título original en español, lo que Cohen atribuyó a la imposibilidad de expresar en otro idioma la musicalidad de la frase. Los ingleses también podrán leerlo: Penguin Books se encargó de traducirlo y lo incluyó en su sección de clásicos, leídos en escuelas del Reino Unido y otros países de habla inglesa. Además, Recorded Books produjo, también en inglés, una versión en audiolibro descargable por internet.

Otro de los lanzamientos de escritores nacionales en Europa se dio en julio. Héctor Abad Faciolince publicó en Inglaterra Tratado de culinaria para mujeres tristes, que llega por primera vez al público anglosajón por la editorial Pushkin Press. Traducido por Anne McLean, quien también ha trabajado con libros de Rosero y Vásquez, entre otros. La novela de Abad El olvido que seremos llegó a Inglaterra en 2010 y Jullius Purcel, crítico de The Observer, la catalogó como "cálida, ingeniosa y conmovedora". Esta novela tiene también versiones en portugués e italiano, y en Francia se publicó hace dos años la novela Angosta por la editorial Evene.

Antonio Ungar presentó la versión en alemán de su Tres ataúdes blancos, publicado por la editorial S. Fischer Verlag y traducido al alemán por Sussane Lange. Hizo parte del festival de literatura de Berlín en septiembre, donde el autor participó en un conversatorio en el que se realizó una lectura del texto en español y alemán. La novela se tradujo también al francés, italiano, turco y neerlandés.

Otras novelas colombianas fueron publicadas en Europa en años pasados como Sin Remedio, la reconocida obra de Antonio Caballero que llegó a Francia en 2009, con traducción de Jean-Marie Saint-Lu para la editorial Belfond. Christine Ferniot de Télérama, la definió como "magníficamente construida. Es una obra de la incomprensión con un humor que sacude al lector". Demasiados Héroes de Laura Restrepo se publicó en inglés e incluso en holandés y sus libros, en especial Delirio, han sido leídos en varios idiomas. Jorge Franco, Fernando Vallejo y Andrés Felipe Solano también están incursionando en Europa. Un mercado que los colombianos parecen estar colonizando sin remedio.

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viernes, 23 de noviembre de 2012

Traducción del código a dialectos, 5 meses



23/11/12

En sesión ordinaria del Instituto Electoral Veracruzano se dio a conocer el convenio que hizo el IEV con la Academia de las Lenguas Indígenas (AVELI) para traducir el código electoral en 5 dialectos de los que se hablan en Veracruz.

La consejera presidenta del IEV Carolina Viveros García explicó que se les presentó por parte de la Academia de las Lenguas Indígenas la propuesta de un esquema de trabajo para la traducción de la Ley aplicable en la materia, durante el año 2012 y 2013. Este proceso que tardará unos 5 meses, y se espera quede listo antes del proceso electoral del año próximo.

Además se contempla la traducción material de información como folletería, trípticos y carteles que serán utilizados durante el Proceso Electoral que se avecina.

La consejera presidenta presentó un informe sobre el Convenio Específico de Colaboración entre el Instituto Electoral Veracruzano y la Academia de las Lenguas Indígenas (AVELI), aprobado por el Consejo General, en sesión extraordinaria de fecha 24 de septiembre del presente año.

Señaló algunas observaciones que la AVELI ha presentado de acuerdo a lo solicitado por este Consejo General; manifestando que el tiempo establecido para la traducción del Código Electoral a las 5 principales lenguas indígenas genera una problemática debido a la amplitud de las traducciones, por la riqueza lingüística y variaciones que tiene una sola lengua.

La AVELI le ha manifestado también que toda vez que el Código Electoral es de uso extenso y no se utiliza un lenguaje común, implica la búsqueda de equivalencias lingüísticas para posteriormente socializar la traducción y verificar que los hablantes lo entiendan.

Dichos trabajos se realizan a través de un colectivo de trabajo en donde se analizan, discuten y reflexionan de manera particular cada uno de los términos a emplearse, requiriendo un lapso de 3 a 4 meses de trabajo.


Texto Editado

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Con acento bossanova


La literatura “verdeamarelha” llega a la ciudad. Bajo un halo bohemio
 
 
GUADALAJARA, JALISCO (23/NOV/2012).- La literatura “verdeamarelha” llega a la ciudad. Bajo un halo bohemio, 18 autores brasileños desnudarán sus textos literarios en el panel Destinaçao Brasil, (Destino Brasil), foro que permitirá compartir letras provenientes del país suramericano -en algunos casos- por primera vez, con el lector tapatío en la Feria Internacional del Libro (FIL) Guadalajara 2012.

Con la promoción de la Embajada de Brasil en México, la Biblioteca Nacional de Brasil y la Cámara Brasileña del Libro, la FIL dará la  bienvenida a creadores brasileños que han hecho de sus obras íconos narrativos en el país de la samba y el bossanova.

Y aunque unos de los máximos de la literatura brasileña, Rubem Fonseca, estará ausente  de los pasillos del festín lector en esta edición, Brasil apuesta por una ruta de textos que le permita entregarse de golpe a obras que dignifican a la lengua lusa.

Destinaçao Brasil es solo un pretexto para adentrarse a las páginas de 18 escritores que recurren al cuento, la novela y el ensayo, como medio de expresión y traducción de su visión en primera, y hasta en tercera persona, de un Brasil que late entre el romance y los ocasos, y a la vez, oscurece en la marginación de su tierra.

LUNES 26 DE NOVIEMBRE
Paula Parisot
A la escritora carioca – nacida en Río de Janeiro- le importa poco hablar de su persona, ella prefiere que los textos interpreten su sentir ante el mundo que la rodea.

De formación universitaria bajo el perfil de Diseñadora Industrial y maestría en bellas artes en Nueva York, Parisot es autora de La dama de la soledad (A dama da solidão), novela publicada en 2007 que le valió ser finalista del prestigiado premio brasileño Jabutí.

Su afilada y directa forma de escribir ha sido traducida al español y al inglés; entre sus publicaciones destaca la novela Goznes y tornillos (Gonzos e parafusos), que para 2013 llegará a México, en paralelo a la presentación de su más reciente obra, Partir, la cual se nutre de ilustraciones nacidas de la propia mano de Parisot.
Para saber

El miércoles 28 de noviembre, Parisot participa en el foro ECOS de la FIL, a las 12:00 horas en la Preparatoria Regional de Cd. Guzmán.

Cíntia Moscovich
Sus textos nacen de tragicomedias experimentadas por ella misma. Sus antepasados judíos la inspiraron  para escribir la novela ¿Por qué soy gorda, mamá? (Por que sou gorda, mamãe?), texto que tras ser lanzado al mercado literario en 2006, fue clasificado erróneamente como de autoayuda; hecho que  no importó, ya que los lectores lo encontraron interesante y eso le permitió tener éxito.

Su trayectoria como escritora es respaldada por siete libros individuales, lo que le ha permitido formar parte de varias antologías literaria, mismas que se han traducido en países como  Italia, Estados Unidos, Portugal, España, Argentina y Suecia.

En 1996, su primer libro de relatos vio la luz  bajo el título El reino de las cebollas (O reino das cebolas). Posteriormente publicó la novela Las dos iguales (Dua siguais), obra que aborda el tema de la homosexualidad, y de “todo lo que es diferente”.

Su pasión por la lectura, llevó a Moscovich a ser colaboradora y editora literaria de relevantes periódicos brasileños como el diario Zero, así como a ser directora del Instituto Estatal del Libro.

Actualmente, esta autora oriunda de Porto Alegre, dirige un taller de creación literaria. Su anhelo de poetiza está guardado en el cajón, pues decidió entregarse de lleno a la prosa.

Para saber
El miércoles 28 de noviembre, Moscovich participa en el foro ECOS de la FIL, a las 11:00 horas en la Preparatoria 12.
 
 
MARTES 27 DE NOVIEMBRE
Cristovão Tezza
Es un escritor al que no hay que perderle el rastro. Su currículo literario brilla por haber recibido el Premio Jabutí, reconocimiento más importante en Brasil, mismo que le otorgaron en 2008  por su novela El hijo eterno (O Filho Eterno). Años atrás, en 2004, fue distinguido por la Academia Brasileña de Letras por su obra O fotógrafo, consagrándose así como uno de los escritores cariocas más influyentes en 2009, según la revista Época.

Es un trotamundos por necesidad. En 1975 escribió su primer libro, La ciudad inventada (A cidade inventada), en Portugal. En Alemania lavó platos para sobrevivir. Regresó a Brasil, y evitó la formación universitaria temiendo que la academia pudiera “destruir su literatura”, pero el destinó lo ignoró y lo llevó a seguir la carrera en letras.

En 1988, su novela Trapo, llamó por primera vez la atención de la crítica, y 10 años después empezó a publicar   novelas como  Juliano Pavollini, Aventuras provisionales, La suavidad del viento y El fantasma de la infancia, entre otras.

Tezza se distingue por sus historias ambientadas en el mundo de la clase media brasileña, que se alimentan de tópicos relacionados a la soledad moral. Su obra ha sido traducida en 10 países, y México no ha sido la excepción.

Para saber
El miércoles 28 de noviembre, Tezza presenta su obra El hijo eterno, junto a El mundo enemigo, de Luiz Ruffato. A las 18:00 horas en el salón B de la Expo Guadalajara.

MIÉRCOLES 28 DE NOVIEMBRE
Bernardo Carvalho

Tras darse cuenta que el sueño de ser cineasta no era lo suyo, sorteó la crisis económica de Brasil y el despido como corresponsal de un periódico en Nueva York, y entonces optó por la literatura para mitigar su fracaso.

Escribe novelas breves. Su obra Nueve noches, es considerada como un clásico contemporáneo de la literatura carioca; el texto ha sido traducido en 20 idiomas, incluido el español. La historia trata sobre una tragedia, que aunque es producto de la ficción, bien puede ser comparada con la vida diaria.

Sus obras han sido premiadas con reconocimientos en el Portugal Telecom, el Machado de Assis y la Asociación Paulista de los Críticos de Arte. Bajo el cobijo de la editorial Companhia das Letras, Carvalho ha publicado los cuentos Aberración, las novelas Once, Los borrachos y los sonámbulos, Teatro, Mongólia y El hijo de mamá, entre otros.
 
Texto Editado

FUENTE:
http://www.informador.com.mx/fil/2012/419545/6/con-acento-bossanova.htm
 FIL ofrecerá Festival de las Letras Europeas



23/11/12
  • Se realizará del 27 al 29 de noviembre, de 19:00 a 20:50 horas
  • Alemania, Austria, Dinamarca, España, Eslovenia, Finlandia, Francia, Irlanda, Reino Unido, Polonia y Serbia se harán presentes en el Festival de las Letras Europeas
 
GUADALAJARA, JALISCO (23/NOV/2012).- La Feria Internacional del Libro de Guadalajara (FIL) ofrece por segunda ocasión la oportunidad de conversar con autores del Viejo Continente. Frente a frente, autor y lector, podrán conocerse en una charla donde el primero podrá exponer las corrientes que lo influencian, las temáticas que suele abordar e incluso puede ofrecer una lectura en su lengua natal, mientras que el segundo podrá profundizar los conocimientos sobre su obra o simplemente conocerlo por primera vez, para que forme parte de sus favoritos en el librero.

Alemania, Austria, Dinamarca, España, Eslovenia, Finlandia, Francia, Irlanda, Reino Unido, Polonia y Serbia se harán presentes en el Festival de las Letras Europeas a través de sus exponentes literarios que, gracias a su obra, han ganado una buena cantidad de seguidores tanto en su país como fuera de él. Entre la lista de invitados destaca el alemán Ingo Schulze, pues tan sólo con su primer libro de relatos obtuvo el Premio Literario Aspekte y, en 2000, The New Yorker lo consideró uno de los “seis mejores novelistas jóvenes de Europa”.

Alemania
Ingo Schulze

El drama de la vida diaria, protagonizado por personajes que viven, inmersos y sin comprenderlo, bajo las presiones que impone la sociedad contemporánea, es el marco argumentativo que caracteriza a la obra del miembro de la Academia de las Artes de Berlín, Ingo Schulze. Nacido en Dresden, en 1962, cuenta con algunas traducciones al español, entre ellas la publicada el año pasado por la editorial Destino, ‘En línea. Trece historias a la manera antigua’.

Austria
Christoph Janacs

Dos novelas, cuatro libros de cuentos y 11 libros de poesía son el total de textos que componen hasta el momento la obra del poeta y narrador nacido en Linz-Austria, Christoph Janacs. Con cerca de 60 años de edad, este austriaco destaca por haber traducido textos de los mexicanos José Emilio Pacheco y Jaime Sabines.

Dinamarca
Janne Teller

Economista por formación y escritora por convicción; la nativa de Copenhague Janne Teller es autora de varios cuentos, ensayos y novelas entre las que destaca La isla de Odín, en la que satiriza a la sociedad actual en un contexto donde expone el extremismo político y religioso. Su título Ven (2012) se encuentra traducido al español en la editorial Seix Barral.

Eslovenia
Mojca Kumerdej

Sus personajes se caracterizan por regirse por la lascivia y vivir a merced de su apetito sexual. Tan sólo en su primera novela hizo una interpretación original con ingenio e ironía del poema épico esloveno Krst pri Savici; y este es sólo un ejemplo que define a esta autora eslovena.
 
España
Isaac Rosa

Dos de sus novelas, El país del miedo y La mano invisible, cuentan con adaptaciones al cine, la última también premiada con el VIII Premio Fundación José Manuel Lara. Con otra novela, El vano ayer, obtuvo el premio Rómulo Gallegos en 2005. Estos son sólo algunos logros que distinguen al autor nacido en Sevilla, en 1974, que se encuentra publicado por la editorial Seix Barral.

Finlandia
Anja Snellman

La conocen como La Sacerdotisa del Punk porque sus primeros trabajos literarios reflejan el radicalismo político y el movimiento punk europeo que marcó sus años universitarios. Antítesis de la hipocresía, rompedora de tabúes y luchadora por la libertad de expresión, así es Anja. Su obra Las chicas de la tienda de mascotas (2010) se encuentra traducida al español en la editorial Maeva.

Francia
Jean Rolin

Su obra se caracteriza por una rica diversidad cultural adquirida mediante sus experiencias como ciudadano del mundo que realizó desde la infancia. En 2008 obtuvo el Premio Internacional de Novela de la Diversidad La Mar de Letras, por su obra Se reventó el manguito, que se convirtió en su primer título traducido al español, publicado en ediciones El Cobre, en 2008.
 
Reino Unido
Owen Sheers

No sólo en la literatura se refleja su talento, sino también en la conducción para televisión y radio. Autor de la colección de poemas Skirrid Hill, con la que obtuvo el premio Poesía Somerset Maugham y conductor de A Poet’s Guide To Britain, este escritor se caracteriza por su eclecticismo. Su obra Resistencia, que cuenta con una adaptación cinematográfica, se encuentra publicada al español en la editorial Alfaguara.

Serbia
Goran Petrovic

Este autor nacido en Kraljevo en 1961 es un estudioso de la literatura serbia y yugoslava en la Facultad de Filología de Belgrado. La editorial Sexto Piso ha publicado tres de sus obras traducidas al español: Atlas descrito por el cielo, La mano de la buena fortuna y Diferencias.

No te los pierdas
El Festival de las Letras Europeas se realizará del 27 al 29 de noviembre, de 19:00 a 20:50 horas, en el Salón 3 de la planta baja de la Expo Guadalajara. El 27 participarán Isaac Rosa y Anja Snellman; el 28 Janne Teller, Goran Petrovic e Ingo Schulze; el 29 Owen Sheers y Mojca Kumerdej.


FUENTE:
http://www.informador.com.mx/fil/2012/419541/6/fil-ofrecera-festival-de-las-letras-europeas.htm
La mejor voz española de la literatura alemana, en la RAE

23/11/12




Miguel Sáenz ha sido elegido para entrar en la Real Academia Española y eso suena a una buena noticia. Se trata de un hombre cosmopolita y políglota, culto y de fina sensibilidad poética, que además ha ejercido de general del cuerpo jurídico de la Defensa, en calidad de mando del Ejército del Aire. Y tiene en su porte ese aire aristocrático, por cierto, de militar de carrera de los antiguos.

Cualquier organismo, aunque se trate de un cuerpo metafórico, requiere de aire renovado para su supervivencia o, al menos, para no caer bajo el peso de la inercia, como le pasa a la Acadèmie Française, verbigracia. Y, aunque me dirán que por la fecha de nacimiento de Sáenz no se trata de ningún jovencito, a ver quién es el guapo que le echa la edad biológica que su dni dice que tiene.

Frivolidades aparte, estamos hablando del traductor al español de lo más escogido de la literatura de habla alemana: Joseph Roth, Handke, Bernhard, Sebald,  Christa Wolf, Döblin, Michael Ende, Günter GrassArthur Schnitzler, estos dos últimos, largamente traducidos por él. También sus traducciones del inglés son numerosas. Pero no se trata de hacer un recuento, sino de destacar la delicada atención de sus versiones al español, la recreación literaria de esos autores que ganan importancia gracias al trabajo creativo pero fiel de Miguel Sáenz.

Lo que les pasa a los autores vivos que ha traducido es que se convierten en amigos suyos –salvo Thomas Bernhardt, pero es que este hombre era un tanto marciano social- porque al rigor y la belleza de sus traducciones se une la simpatía y la elegancia de su personalidad. Vaya hagiografía que me está saliendo. Pero es que es así. Pregunten y verán lo que cuentan.

Su primera traducción fue la de un libro de Peter Handke, Carta breve para un largo adiós, de 1976, que recuerdo haber comprado en la feria de Madrid, atraída por el titulo y alguna referencia de la solapa. Nada más empezar a leer, a pie de caseta, fui a consultar el nombre del traductor. Y me hice fan.

Leer libros  traducidos del alemán en España ha sido una tortura para quienes, además de enterarse de lo que el autor dice, querían disfrutar de una buena obra. Las traducciones que ofrecen algunas editoriales sobre filósofos alemanes, por ejemplo, son un desafío a la más imaginativa y pacienzuda cabeza lectora en España. Hasta que descubres que no es a causa de la dificultad intrínseca del pensamiento del filósofo en cuestión sino debido a la traducción. Y a que el traductor tampoco se ha coscado de gran cosa.

Ya he comentado alguna vez la suerte que tienen algunos escritores con sus traductores. Los mencionados y muchos más son los beneficiarios de un trabajo que alcanza un nivel muy alto. De excelencia, como se pirran por decir los hombres públicos ahora. Esas traducciones han hecho lectores adictos a los autores traducidos. Una responsabilidad que Saénz cumple brillantemente.

Otra impronta del nuevo académico es la inmersión doctoral que hace en cada autor que traduce. Y el encanto con que habla de ello. Recuerdo una conferencia en Madrid, hace años, en la que desarrolló la vida y milagros de Arthur Schnitzler de tal modo que al público más atento no le quedó otra que salir en busca de sus libros. Eso es triunfar.

La RAE gana con esta elección, eso sin duda. Y, como sucede en las cosas humanas que acaban bien sin que haya mediado nuestro lado oscuro para torcer las intenciones, con Miguel Sáenz trabajando en la Academia ganamos todos.


FUENTE:
http://www.cuartopoder.es/otromilagro/la-mejor-voz-espanola-de-la-literatura-alemana-en-la-rae/3825



Entrevista a Luz Gómez García, Premio Nacional de Traducción por "En presencia de la ausencia"
 
Voz y memoria de Mahmud Darwix en español (1/2)


23/11/12
Luz Gómez García (Madrid, 1967) lleva más de una década acercando a los lectores españoles la obra del poeta palestino Mahmud Darwix, traduciendo la poesía árabe al castellano. Por uno de sus últimos trabajos (En presencia de la ausencia , la autobiografía poética de Darwix), ha recibido recientemente el Premio Nacional de Traducción otorgado por el ministerio español de Cultura.

Hemos conversado con ella sobre el oficio de traducir y sus dificultades, sobre la poesía árabe y algunos de sus autores, sobre los encuentros y desencuentros entre las culturas de las orillas del Mediterráneo. En los próximos días, publicaremos una segunda parte de esta entrevista, en la que la conversación deja los temas culturales para abordar la situación de Palestina.


En primer lugar, queremos acercarnos de tu mano a En presencia de la ausencia. ¿Qué puedes contarnos sobre lo que encontrará el lector cuando se sumerja en este libro?

Pues lo primero que encontrará será una gran dificultad. Y encontrar una dificultad, en el caso de una traducción, siempre es achacable al traductor. Eso es una ley de la naturaleza. Y es justo, hay que achacar al traductor su impericia a la hora de traducir; pero en este caso, aunque esté mal que yo lo diga, en descargo mío he de decir que es un libro especialmente difícil. En él se tratan multitud de temas: la identidad, el exilio, la memoria, Palestina, el amor, la muerte, la historia... Y además se hace con muchos estilos de escritura, desde la escritura del Corán hasta la escritura de la literatura de adab [1], la poesía clásica, la poesía contemporánea... así como las indagaciones por libre en el lenguaje. Une la poesía y la prosa, y dentro de la poesía, en él hay lírica, épica, elegía... se salta todas las divisiones de géneros. Por eso, es un libro complejo, muy denso, en el que es difícil adentrarse. Es difícil para el lector árabe; y por tanto es difícil en una traducción. Pero más allá de esas dificultades, por lo que me parece un libro magnífico es, precisamente, porque en él se aúnan con maestría muchas cosas. Se trata de la autobiografía poética de Mahmud Darwix, pero va más allá de eso. En el libro se vincula su historia personal con lo colectivo, que es la historia de la Nakba [2] , la historia palestina e incluso la historia árabe desde 1948. Por todas esas razones es un libro muy significado. Ahora bien, tampoco ha de tomarse la dificultad a la que me refiero como un obstáculo insalvable: son complejos y extraños los dos primeros capítulos pero luego el lector mínimamente familiarizado con la historia de Palestina va reconociendo sus principales acontecimientos.


Ante todas esas dificultades, ¿cómo fue el proceso de traducción?

Este libro lo traduje porque el propio Darwix insistió en ello. No está aún traducido al francés, idioma en el que siempre han ido por delante con sus traducciones. Y la versión norteamericana salió a la par que la mía. Cuando publicaba un libro, él tenía la costumbre de llamar a algunas personas y preguntarles qué les parecía. Después de publicar En presencia de la ausencia, y luego La huella de la mariposa (que saldrá también en Pre-Textos en breve), me llamó un par de veces. Me acuerdo de que con En presencia de la ausencia yo le dije: «Es un libro extraordinario, pero realmente difícil, no sé cómo traducirlo, no sé cuál será el resultado en español, cómo lo va a entender el lector»; estas cosas de los traductores. Con La huella de la mariposa, fue mucho más fácil, es un libro más asequible, más cariñoso, de poemas en prosa, una especie de diario poético. Pero En presencia de la ausencia me parecía una locura, porque como comentaba antes es un libro difícil incluso para el lector en árabe. Pero empecé con la tarea y la suerte es que, hasta que murió, siempre he contado, tanto en este libro como en los anteriores, con la comprensión de Mahmud. Yo le contaba mis dificultades con la traducción, a veces enormes, pero siempre me decía: «sigue traduciendo, lo importante es que suene bien». Y así, intentándolo, y rehaciéndolo una y otra vez el libro empezó a tomar forma y sentido. He de decir que ningún poema de los que he traducido de él tiene tantas versiones como cada página de este libro en prosa. 


Llevas ya casi dos décadas acercándonos a los lectores de español la obra de Darwix. ¿Cómo ha sido tu trayectoria como traductora de sus libros?


Empecé a traducir porque quise recuperar el contacto con algo que siempre me había gustado e interesado mucho: la poesía, tanto la árabe como la española. Me interesaba la poesía, pero yo no soy poeta, y fue a través de la mediación entre las lenguas como encontré una manera de recuperar esa afición que tenía. En aquel momento, Darwix era uno de los autores que más conocía y que más me gustaba: lo había leído, había ido a un concierto de Marcel Jalife en Túnez que me había impresionado... Así que empecé a traducir sus poemas.

El primer libro que publiqué fue Limada tarakta al-hisan wahidan (literalmente ‘Por qué has dejado solo al caballo’), en el que empecé a trabajar en 1996. Empecé a traducirlo y a pelearme con las editoriales para sacarlo adelante. Fue muy complicado pero al final se publicó en Cátedra en el año 2000, con otro título que yo elegí, el de un poema del libro: El fénix mortal. Y cuando salió, una de las primeras preguntas que me hacían los que sabían árabe era acerca del título. Yo no conocía a Darwix en aquella época, me puse en contacto con él (después de varias peripecias conseguí que el contacto fuera directo y no a través de la revista que dirigía, Al-Karmel), y una de las primeras cuestiones que surgió en aquellas primeras conversaciones por teléfono fue precisamente el asunto del título. Yo le expliqué que en castellano eso de «por qué has dejado solo al caballo» no se entendía, que hacía pensar en una película del Oeste, y que eso en España no nos decía nada en relación con Palestina. Y que, por el contrario, la imagen del fénix tiene mucha fuerza en el imaginario occidental, muchas implicaciones... Guardó un silencio muy peculiar suyo de aceptación, incluso creo que le gustó. Seis años después, en un encuentro en Madrid en la Residencia de Estudiantes en el que dialogaba con Mark Strand, al nombrar el libro en árabe lo hizo con el título que yo le había dado (Masra al-unqá). Realmente lo complicado a efectos editoriales fue este primer libro. Aún publiqué en Cátedra el siguiente, Estado de sitio. Luego pasé a Pre-Textos, donde salieron Poesía escogida y Como la flor del almendro o allende.


Dice el propio Darwix en este libro: «La fascinación por la mitología condiciona tu elección de las metáforas». Esto nos lleva a pensar en una de las mayores dificultades que se pueden presentar a la hora de traducir una escritura como la suya, en la que los referentes culturales tienen un enorme peso. ¿Cómo afrontas ese reto de trasladar al lector un imaginario que no es el suyo? ¿Se siente incluso un cierto vértigo ante la posibilidad de que incluso a una misma se le puedan escapar algunas referencias, algunas claves?
Es cierto que hay muchas referencias que a veces ni siquiera conoces y que es necesario investigar. Por ejemplo, en este libro había una parte de los referentes que me era familiar: todos los que vienen del imaginario judeocristiano, del islámico, de la historia palestina... Pero había otros que me costaba entender, que desconocía.

Por ejemplo, hay muchas referencias a los cananeos, así que investigué sobre su historia, su modo de vida, su artesanía, sus dioses... Y sin embargo tenía la sensación de que no encontraba lo suficiente, que me faltaban datos. De repente, leyendo hace poco a Shlomo Sand, un gran historiador israelí, encontré unas líneas en que hacía referencia a un pasaje bíblico relacionado con los cananeos: «No os queremos ni por leñadores ni por portadores de agua». Al leerlo sentí que me sonaba mucho, y recordé que era algo que yo había traducido en este libro de Darwix. Lo busqué y encontré que yo había traducido que Menahem Begin decía: «No os quise ni por leñadores ni por azacanes» (azacanes es un término procedente del árabe que significa «porteadores de agua»). Me di cuenta de que, aunque desconocía la referencia, me había llevado ahí la lógica interna de la lengua de Darwix.

Y eso ocurre muchas veces: es la lengua la que te lleva. Solemos darle mucha importancia a trasladar los referentes, a salvar la distancia cultural... y se nos olvida que hay una cultura común. Nos quieren hacer caer en la trampa de la distancia cultural. Yo siempre defiendo lo contrario: que hay una cultura común, que tiene que ver con el Mediterráneo. Yo vengo de Segovia, de la Castilla profunda, y tardé en comprenderlo. Se trata de una mezcla de elementos materiales e inmateriales. Yo tengo una formación cartesiana y marxista, por lo que lo inmaterial no forma parte de mi discurso... Son por tanto la propia lengua árabe y la cultura común los mejores aliados para salvar las supuestas diferencias culturales. Sin olvidarse de la documentación.


Sin embargo, también en esa propia lengua está parte de la dificultad. Rescatamos otra cita del libro: «No sueles preguntarte “qué voy a escribir”, sino más bien “cómo voy a escribir”». O, más adelante: «La letra puede gustarme o no gustarme, pero lo que me cautiva es el ritmo». En la traducción, y sobre todo en la de poesía, también es importante tener en cuenta el ritmo, el sonido, la oralidad: la voz del autor, en definitiva. ¿También en esto nos lleva la lengua?
Cuando al traducir nos encontramos con un pasaje en que predomina lo connotativo, lo fonético, ... es una de las cosas más complicadas que hay en árabe. Cuando uno se enfrenta a un autor árabe y aparecen los juegos lingüísticos es un horror. Darwix tiene algunas cosas en este sentido, pero no es de los más aficionados a este tipo de juegos, no tanto como otros autores como Adonis o Ounsi al-Haj.

Yo creo que, muchas veces, para traducir estas cosas, más que las notas a pie de página, importa conectar con los referentes del lector: si uno encuentra en árabe que algo le recuerda a la muerte, al nacimiento, a la religión, a lo que sea, la labor es trasladar esa sensación al castellano. Y como decíamos antes, eso no es tan imposible como puede parecer, partiendo de esa cultura común en la que muchas cosas se viven de manera parecida, y por tanto se pueden aproximar a través de la lengua. Un día hablando, Darwix me dijo: «Anti lisani bi-l-isbaniya» («Tú eres mi lengua en español»). Pero en árabe hay dos palabras que se traducen por lengua: luga, que se refiere a lo lingüístico, al idioma; y lisan, que se refiere al habla, a la lengua en cuanto músculo, a lo hablado. Y él usaba este segundo término, lisan, porque la traducción es lo que te permite hablar en otro idioma, decir realmente las cosas en él.


Sin abandonar el oficio de la traducción, pero en el terreno más pragmático, ¿cuál crees que es el estado actual de la traducción de obras escritas en árabe en España?
Sobre esto ya se han escrito algunas cosas, por ejemplo se han ocupado de ello los profesores Luis Miguel Pérez Cañada y Gonzalo Fernández Parrilla. Yo voy a resumir a mi manera.

Ha habido tres momentos (espero que haya cuatro, pero creo que aún estamos en el tercero) en la traducción de la literatura árabe en España en época actual (desde la Transición, por hablar como de todo en este país). Diríamos que hubo un momento, hasta el premio Nobel a Naguib Mahfuz, en el año 1988, en que la traducción del árabe era una cosa voluntarista, de personas que se dedicaban a ello por su propio interés y su propio empeño. Las editoriales comerciales no estaban dispuestas a publicar literatura árabe, y existía el convencimiento de que esta no llegaba a los españoles, que no les podía interesar. Tras el Nobel a Mahfuz, parece que se descubre la literatura árabe, y se produce cierto auge. En esta segunda etapa se publican bastantes traducciones, interesa algo más y encuentra su hueco en el mundo editorial. Pero cuando ese boom relativo pasa, se vuelve a caer en un bucle en el que se publican solo autores contados. Podría llegar a parecer que no hubiera más literatura árabe que ese puñado de nombres.

En esto parte de culpa la tendremos los especialistas, naturalmente, que no habremos sabido llegar a los editores, hacer el trabajo; pero no solo. Es necesario decir que en España ha faltado apoyo institucional a la difusión de la cultura árabe, no ha habido un interés real en fomentarla. Por ejemplo, por parte de la Agencia Española de Cooperación Internacional o, por supuesto, de Casa Árabe, que ha centrado su labor en lo la economía, la sociología, la política... pero ha dejado muy de lado la literatura. De todas formas, me parece que hay que ser muy crítico con cómo se ha desarrollado el poco apoyo institucional. Colecciones de literatura como la de la AECID con feos diseños y mala distribución le hacen un flaco favor a la literatura árabe. Desde que empecé a traducir a Darwix tuve claro que hacerlo bien consistía no solo en traducirlo lo mejor posible sino en editarlo lo mejor posible. Y eso significaba sacarle del circuito del voluntarismo (o de la militancia) y meterlo en las grandes colecciones de poesía. En ese sentido, la colección de Cátedra primero, escasa pero muy prestigiosa, y Pre-Textos después han sido el salvoconducto para que el lector de poesía española leyera a Darwix en su marco: el de la poesía universal del siglo xx.


Dentro de ese marco, lo cierto es que Darwix ha sido uno de esos autores más traducidos, y por tanto más leídos, fuera de los países arabófonos. ¿Crees que en cierto modo eso ha hecho que su obra, con sus particulares características, se convierta en una especie de paradigma de lo que el lector espera cuando aborda la poesía árabe?
Imagino que te refieres a la lectura política. Una de las cosas que más ha condicionado la percepción de la poesía árabe, y en general de toda la cultura árabe, es su lectura política. Es cierto que la historia árabe del siglo xx es trágicamente política, que está marcada en términos de revolución, contrarrevolución, tercer mundo, militancia... Pero yo intento reivindicar que la literatura árabe, y la poesía en concreto, son universales: que tienen ese tinte, es cierto, pero no es ni más marcado ni distinto ni más específico que lo que sucede en otras literaturas o en otras culturas. En comparación con Hispanoamérica, por ejemplo, la poesía árabe de los últimos cuarenta años, por no ir más lejos, no es más política que la poesía iberoamericana de la misma época. ¿Qué sucede? Que los lectores occidentales probablemente solo podemos acercarnos a ella e interpretarla desde un punto de vista político, y no cultural. Ese es el estereotipo en el que estamos inmersos, en el que la política, o su carencia, o su distorsión, lo puede todo. A mí, que soy una persona familiarizada con la ideología y con, las construcciones políticas del mundo árabe del siglo xx, podría parecerme normal que fuera así. Pero hay que discutir qué entendemos por política: la política también es creación, la política es cultura, la política es vanguardia. Cuando uno lee a Mahmud Darwix en términos políticos restringidos está equivocándose, porque si Darwix es política lo es en el sentido mencionado. Puedo estar de acuerdo en que la poesía de Darwix es una poesía política, si por eso se entiende que trata de aspectos como la identidad, las relaciones entre lo local y lo universal, el ideal humanista. Evidentemente eso es política, pero no árabe, no específica, no reductora. Resumiendo, creo que a Darwix se le puede leer, primero, en clave darwixiana; en clave palestina, por supuesto; en clave árabe; incluso en clave mediterránea. Pero si Darwix es un gran poeta, como yo creo, todos estos aspectos se integran y permiten una lectura universal. Compartimentar no deja de ser una práctica orientalista cuando se pone al servicio de la eterna dialéctica inferior/superior.


Además de En presencia de la ausencia, acabas de publicar otra traducción, la del libro de poemas Un minuto de retraso sobre lo real, del libanés Abbas Beydoun (Vaso Roto, 2012). ¿Tienen algo en común estos autores? ¿Qué motivos son los que te llevan a traducir un libro al español, qué es lo que despierta tu interés por hacer ese trabajo?
En general, con las traducciones una se pregunta: «¿Para quién traduzco?». Porque leer en árabe es una cosa y traducir es otra. E inevitablemente te dices: «En esta España en la que estamos, con la deuda, con los desahucios, con este Gobierno expoliador, ¿para qué traducir estas cosas?» Pues bien: yo creo que sí que es imprescindible traducirlas, y no por una cuestión autorreferencial. No soy de las personas que defienden románticamente la idea de arabismo, de un Al-Ándalus mítico;  ni me lo planteo, no va conmigo y lo veo como el origen de mil malentendidos. Pero sí creo en el decurso cultural en términos generales. Así que cuando traduzco intento proyectar eso. Cuando traduje a Abbas Beydoun después de haber traducido a Darwix, me di cuenta de que no se parecían en nada y sin embargo algo los unía. Yo creo que coinciden en un intento de rebasar el marco árabe. Son esos los poetas árabes que más me interesan. Beydoun es un poeta que, desde el Líbano, ha entroncado con la literatura centroeuropea, con la que Darwix, por ejemplo, no tuvo un contacto preferente. Para mí eso me supone un reto como traductora.


Por último, queremos pedirte una recomendación literaria. ¿Qué obras aconsejarías a un lector que quiera iniciarse en la literatura árabe, a alguien que desee adentrarse en esta cultura de la que como decíamos el Mediterráneo nos une y separa a la vez?


Voy a recomendar tres obras conocidas, pero voy a explicar por qué.

La primera, para cualquiera que quiera entender las construcciones literarias, culturales, ideológicas, políticas e históricas del mundo árabe contemporáneo, hay una obra de narrativa fundamental y que se puede leer en todos esos registros, que es Hijos de nuestro barrio, de Naguib Mahfuz. Creo que es una obra que resume muy bien la fuerza, a veces demoledora, del monoteísmo.

En segundo lugar, una obra iconoclasta, que rompe con los esquemas patriarcales, no solo en cuestiones de sexo y género sino lingüísticas: Historia de Zahra, de Hanan as-Shaikh.

Y en tercer lugar, La Cueva del Sol, de Elias Khouri, una de las más impresionantes novelas sobre la experiencia del pueblo palestino.

Estas serían las tres obras que yo recomendaría para empezar, siguiendo la referencia mediterránea de la pregunta. Pero con ello queda fuera una que es fundamental: Ciudades de sal, de Abderrahman Munif. Es una novela sobre el petróleo y la transformación a la que ha llevado a la Península Arábiga y al Golfo. Quizá es la novela que hay que leer para entender el futuro del mundo árabe, que parece desplazarse del Mediterráneo al Golfo.


Notas:

[1] El adab es un género literario surgido en la cultura árabe durante el periodo abbasí. A partir de los tratados moralizantes de buenas costumbres y urbanidad se fue generando una prosa rica y preciosista que trataba las humanidades en general, y cuyo equivalente en la cultura europea son las Belles Lettres.

[2] Literalmente, 'desastre'. El término se refiere a los sucesos acaecidos en 1948 como consecuencia de la creación del Estado de Israel, cuando 750 000 palestinos fueron expulsados, desplazados y desposeídos de sus propiedades; mientras, a los que permanecieron en Palestina los sometieron a un régimen militar que restringía con dureza sus derechos y libertades.




FUENTE:
http://www.rebelion.org/noticia.php?id=159635


23/11/12  

El nuevo académico, Miguel Sáenz
 El nuevo académico, Miguel Sáenz

Miguel Sáenz es elegido nuevo académico de la RAE


La Real Academia Española eligió ayer a un nuevo miembro: el traductor  Miguel Sáenz. «Estoy muy contento –declaró a este diario–. No lo esperaba. Todo el mundo me decía que era difícil, así que me lo he tomado todo muy deportivamente. He recibido muchos testimonios de académicos que se han molestado en escribirme y en llamarme. Me he encontrado con votos de personas que no me conocían personalmente y eso, para mí, es muy satisfactorio». La candidatura de Miguel Sáenz, que ocupará el sillón «b» de la RAE, vacante desde el fallecimiento de Eliseo Álvarez-Arenas en septiembre de 2001, estuvo respaldada por Luis Goytisolo, Pedro Álvarez de Miranda y Margarita Salas, y se ha impuesto a la del también traductor Antonio Pau. «Me alegro de haber entrado como traductor porque siempre ha sido un trabajo que ha estado muy menospreciado. Su labor nunca se estima. Este ingreso es un apoyo para todos los traductores. Se van a alegrar todos. Hay muchos traductores en la RAE, como Rodríguez Adrados o Javier Marías, pero traductores puros..., nadie ha entrado hasta ahora», comentó Sáenz, que ha vertido a nuestra lengua texto de escritores tan importantes como Goethe, Kafka, Alfred Döblin, Henry Roth, Christa Wolf, Joseph Roth, W. G. Sebald, Michael Ende o Joseph Conrad. «La traducción es una actividad muy desesperada. Es una aproximación a algo que no existe: la traducción  perfecta. Existen en España doce o tres personas que traducen maravillosamente». Sáenz llega a la RAE con la vocación de aprender y de trabajar en el español de los 22 países que lo hablan, y no sólo el de España. Conocer toda su riqueza y reivindicar que en ambas orillas del Atlántico hay traductores increíbles: «Son tan buenos los de aquí como los de hispanoamérica. A veces rechazamos traducciones que vienen de allí, y es algo que debemos superar, porque cuando leemos a Rulfo y a Borges, por ejemplo, aceptamos ese español».

La irrupción de las nuevas tecnologías ha impactado en la traducción de igual manera que en otros campos. El nuevo académico subraya las ventajas que han venido con ellas. «Las tecnologías repercuten por un lado de una manera muy positiva, porque ahora el traductor tiene muchos más medios para poder investigar que antes eran inimaginables. Hoy el traductor que no averigüe o no profundice en un texto es porque realmente no quiere. Las nuevas tecnologías suponen para nosotros una inmensa ayuda. Sólo el ordenador es una ventaja enorme. Pero también, hay que advertir, que están repercutiendo en el idioma de una manera que no es tan positiva. En ocasiones lo deterioran, como sucede con los mensajes rápidos y los chats. Y eso redunda en un español mucho menos rico, pero en el campo de la literatura su efecto es muy beneficioso».
 
«Aprendí mucho en la ONU»
Sáenz nació en Larache, Marruecos, en 1932, y fue traductor de las Naciones Unidas en sus sedes de Nueva York y Viena. Una experiencia que dejó su poso. «Tengo que reconoce que aprendí mucho en las Naciones Unidas. Y una de las cosas más importantes que comprendí durante ese tiempo es el sentido de la responsabilidad. Existen traducotres, al español, al francés, al inglés, que están allí en una sala cercana al Consejo de Seguridad. Su cometido es traducir una resolución en cuestión de minutos. Elegir una palabra o un término es fundamental, porque la resolución del Consejo tiene que concordar en todas las lenguas y no es igual «deplorar» que «lamentar», por ejemplo. Ahí se aprende cómo la palabra lleva una carga de responsabilidad que puede afectar, incluso, a la vida humana».


FUENTE:
http://www.larazon.es/noticia/7015-la-traduccion-siempre-ha-estado-menospreciada

Muere a los 79 años exitoso escritor australiano Bryce Courtenay

 

22/11/12

 

Su historia sobre un niño que crece en la Sudáfrica del apartheid vendió ocho millones de ejemplares, fue traducida a 18 lenguas y también llegó a la pantalla grande de la mano de Hollywood.

   
Escritor australiano Bryce Courtenay / Flickr CC Yodel Anecdotal

El prolífico novelista australiano Bryce Courtenay, quien vendió más de 20 millones de libros, falleció a los 79 años, informó hoy su editor mediante una declaración. 

Courtenay, nacido en Sudáfrica, abandonó en su momento una carrera de 30 años en la publicidad para dedicarse a ser escritor de tiempo completo luego del éxito de su primera novela, "The Power of One", en 1989. 

La historia sobre un niño que crece en la Sudáfrica del apartheid vendió ocho millones de ejemplares, fue traducida a 18 lenguas y también llegó a la pantalla grande de la mano de Hollywood. 

Courtenay, quien abandonó Sudáfrica cuando tenía 17 años, atacaba el esnobismo literario e insistía en que el valor de un autor debía ser juzgado por las ventas de sus libros. 

"¿Cuál es el objetivo de ser un escritor impopular? No tiene mucho sentido. Para mí no lo tiene", aseguró alguna vez. Courtenay falleció de cáncer este jueves en su vivienda en Canberra. 



FUENTE:
http://www.latercera.com/noticia/cultura/2012/11/1453-494821-9-muere-a-los-79-anos-exitoso-escritor-australiano-bryce-courtenay.shtml
Presentan en Egipto traducción de charlas de Juan Bosch  


 22/11/12
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El Cairo, 22 nov (PL) La embajada de la República Dominicana aquí presentó una traducción al árabe de conferencias del extinto patriota e intelectual Juan Bosch en el marco de una Jornada Cultural Dominicana con sede en el Instituto Cervantes. Bosch es una personalidad ligada a la historia dominicana por su labor como opositor de la dictadura trujillista y la profundidad de sus obras que abarcan varios géneros de la literatura, subrayó la embajadora del país caribeño aquí, Maria Gabriella Bonetti, en su presentación.

La recopilación, titulada "Breve historia de los pueblos árabes", fue entregada a la Biblioteca Adolfo Bioy Casares del Instituto Cervantes y en breve plazo será incluida en el catálogo de la Biblioteca de Alejandría, anunció la embajadora durante su exposición, a la que asistieron miembros del Cuerpo Diplomático acreditado aquí.

La Jornada Cultural culmina hoy con una Fiesta Latina, parte del esfuerzo de difusión de la cultura latinoamericana en este país del norte de África.


FUENTE:
http://www.prensa-latina.cu/index.php?option=com_content&task=view&idioma=1&id=735241&Itemid=1

Miguel Sáenz, uno de los grandes traductores del alemán, nuevo académico de la Lengua


22/11/12

  • Saenz ha traducido a autores del prestigo de Handke, Roth o Bernhard.
  • Fue traductor de la ONU y teniente auditor del Ejército del Aire.
  • Ganó la medalla Goethe y la Orden del Mérito de la República Federal.

Miguel Sáenz, Premio Nacional de Traducción y traductor de importantes autores en lengua alemana, como Günter Grass, Peter Handke o Thomas Bernhard, ha sido elegido este jueves académico de la Lengua, en segunda ronda de votaciones, para cubrir la vacante de Eliseo Álvarez Arenas. La candidatura de Sáenz (Larache, Marruecos, 1932), que fue traductor de las Naciones Unidas en sus sedes de Nueva York y Viena, se impuso así a la de Antonio Pau Pedrón, Premio de Ensayo y Humanidades Ortega y Gasset y traductor de Rilke, Hölderlin y Novalis.

La del nuevo académico fue presentada por Luis Goytisolo, Pedro Álvarez de Miranda y Margarita Salas. Al finalizar el pleno, el secretario de la Real Academia, Darío Villanueva, le comunicó el resultado de las votaciones, en las que han participado los 24 académicos que asistieron al pleno de y otros seis que votaron por correo, aunque este último tipo de votos solo es válido para la primera ronda.

Además de "un gran traductor", Sáenz es teniente auditor jurídico del Cuerpo Jurídico del Ejército del Aire y llegó a ser general auditor del Cuerpo Jurídico de la Defensa. "Es el primer representante del Ejército del Aire que entra en la Real Academia Española", señaló Villanueva. Como traductor, el nuevo académico "será muy útil a la Academia porque conoce varias lenguas y tiene también el talento de la escritura". Además de traductor, es novelista y autor de obras de crítica literaria, afirmó el secretario. 

"Sáenz es políglota y en la Academia el trabajo del día a día se hace teniendo en cuenta los diccionarios de otras lenguas", con lo cual su incorporación será "muy rentable para esta institución", añadió. Miguel Sáenz ha asegurado que "es un honor enorme pertenecer a la Academia", y trabajar por una lengua, la española, que comparten veintidós países, como él ha "redescubierto" en los organismos internacionales para los que ha trabajado.

Sáenz considera que "puede ser interesante su experiencia" en esos organismos, pero sobre todo, su trayectoria en las Naciones Unidas, donde, asegura, aprendió "más cosas que en la Universidad". El nuevo miembro de la RAE, también ha destacado la modernización de la institución, por su apertura en los últimos años hacia Latinoamérica, algo que califica de "admirable".

Sáenz no considera que las nuevas tecnologías supongan una amenaza para el lenguaje, aunque "son un arma de doble filo". "La posibilidad para un escritor de narrativa o poesía de tener contacto con un público", agrega, es una gran ventaja, y las nuevas tecnologías ayudan a la "difusión y el conocimiento".

Miguel Sáenz ha traducido a autores como Goethe, Kafka, Alfred Döblin, Henry Roth, Christa Wolf, Joseph Roth, Salman Rushdie, W. G. Sebald, Michael Ende o Joseph Conrad. Ha sido distinguido también con la Medalla Goethe, la Orden del Mérito de la República Federal de Alemania y el Premio Nacional de Traducción de Austria.


FUENTE:
http://www.20minutos.es/noticia/1656220/0/miguel-saenz/traductor/academico-lengua/

La Generalitat se niega a dar ayudas para traducir del castellano al catalán



22/11/12
Cultura ha rechazado las peticiones de subvención realizadas por las editoriales

  
El consejero de Cultura, Ferran Mascarell, dialogando con el presidente de la Generalitat, Artur Mas
El consejero de Cultura, Ferran Mascarell, dialogando con el presidente de la Generalitat, Artur Mas - Foto: M. González/Shoothing


BARCELONA– La consejería de Cultura niega las ayudas económicas para traducir al catalán obras que tengan el castellano como su lengua original. Así lo ha hecho para subvencionar la traducción al catalán de obras literarias escritas en otras lenguas, descartando todas aquellas que son oficiales de España y «de autores españoles».

La Oficina de Apoyo a la Iniciativa Cultural, que depende de la consejería, sostiene que esta función debería ser llevada a cabo por el Ministerio de Cultura porque desde el Gobierno ya se aportan «ayudas para el fomento de la traducción y edición entre lenguas oficiales españolas de obras de autores españoles». Este ha sido uno de los principales motivos esgrimidos por la Generalitat para rechazar las peticiones de ayuda por parte de editoriales catalanas en su última convocatoria.

«Para que todo quede en casa»
El más perjudicado en esta exclusión ha sido el sello Queralt Ediciones, especializado en títulos para escolares, que ha visto como se han declinado todas sus peticiones. Un portavoz de esta editorial aseguró ayer a este diario que «las ayudas de la Generalitat deberían ser para cualquier lengua del Estado porque así todo queda en casa». Tras esta negativa, la editorial también ha descartado dirigirse al Ministerio de Cultura para tener alguna ayuda económica.

Otra editorial afectada por estos controvertidos criterios ha sido Ara Llibres, que no ha podido tener ninguna subvención del departamento que dirige Ferran Mascarell para traducir a la lengua catalana el último trabajo literario de Rosa Regàs, «Contra la tiranía del dinero».

La Generalitat también ha descartado facilitar cualquier tipo de subvención a aquellos títulos que cuentan con el apoyo del Ministerio para su edición en catalán. Eso es lo que le ha ocurrido a Edicions 62 con los últimas obras de Delphine de Vigan y David Grossman, y que han sido objeto de ayudas del Gobierno para la edición de los libros. El mismo caso se repite para Raval Edicions y su edición del volumen titulado «De sobte un truc a la porta» y que no será apoyada por la Generalitat. 

En su última convocatoria, la Oficina de Ayuda a la Iniciativa Cultural ha rechazado la totalidad de las peticiones realizadas por las editoriales para poder publicar traducciones al catalán.

Por otra parte, a diferencia de la administración catalana, se da el caso que el Ministerio sí facilita ayudas para la traducción entre lenguas oficiales del Estado. Es un sistema de prestaciones a la edición y que para este año cuenta con un presupuesto cercano a los 2 millones de euros. El departamento que dirige José Ignacio Wert tampoco niega subvenciones a aquellos sellos que también las hayan logrado de otras administraciones, aunque sí baja la cuantía económica cuando esto sucede.

La Generalitat destinó en 2010 un total de 159 millones a promocionar el catalán desde las distintas consejerías.


FUENTE:
http://www.larazon.es/noticia/3467-la-generalitat-se-niega-a-dar-ayudas-para-traducir-del-castellano-al-catalan

jueves, 22 de noviembre de 2012

Carlos Fuentes, figura estelar del ‘boom’ latinoamericano: Vargas Llosa



22/11/12
                       
Al recibir el Premio Internacional Carlos Fuentes a la Creación Literaria en el Idioma Español, Mario Vargas Llosa (1936) aseguró que en su vida Carlos Fuentes demostró hasta la saciedad que la mejor manera de exaltar la historia y la cultura propias no es optando por la reclusión provinciana o el campanario espiritual, sino ventilándolas y exponiéndolas a la prueba del mundo.

En una ceremonia encabezada por el presidente Felipe Calderón Hinojosa celebrada en La Ciudadela. La Ciudad de los Libros, a la que se dieron cita integrantes de la comunidad cultural, el Premio Nobel de Literatura 2010 elogió la vida y obra de quien fue considerado uno de los pilares de la literatura latinoamericana: Carlos Fuentes.

Asimismo evocó con cariño a su colega y amigo, al tiempo que dijo las más grandes experiencias que compartió con Fuentes fue la de ser representantes del llamado “boom latinoamericano”.

En ese movimiento literario, destacó el novelista, Carlos Fuentes jugó un papel muy importante, no sólo por las obras que escribió sino por la manera como promovió la creación de los jóvenes escritores latinoamericanos.

En su intervención Vargas Llosa, uno de los más importantes novelistas y ensayistas contemporáneos, agradeció el premio y dijo que la generosa decisión del jurado se debe en buena medida “a ser yo algo así como el último sobreviviente de ese movimiento de promoción de escritores que a partir de los 60 dio brillo y difusión por una parte del mundo a la narrativa latinoamericana, me refiero al llamado boom”.

Dijo que del boom fue figura estelar y esforzado promotor el autor de “La muerte de Artemio Cruz” (Carlos Fuentes), de quien dijo que su reciente desaparición sentida por doquier dio origen a merecidos homenajes y recordatorios tanto en América Latina como en Estados Unidos y otros países alejados, donde había radiado su obra, una de las más traducidas y estudiadas de la literatura contemporánea.

Consideró que el reconocimiento “no puede ser más justo, pues la obra de Carlos Fuentes, enorme, de dimensiones balzacianas, a la que él organizo como una totalidad con el título general de la edad del tiempo, abarca todos los géneros: la novela, el cuento, el ensayo, el teatro, el artículo, hasta la difícil poesía”.

Calificó a Fuentes como un escritor universal, un mexicano que siguiendo la herencia de tantos compatriotas suyos inminentes, como un Alfonso Reyes u Octavio Paz, se movió con desenvoltura en otras tradiciones y culturas, pero sin convertirse en un epígono.

Consideró que gracias a escritores como Fuentes “esos conceptos que parecen irremediablemente adversarios, lo ajeno y lo propio, pierden sus aristas, se conjugan y funden”.

Recordó haber conocido al autor de obras como “La región más trasparente” en 1962 siendo periodista para la extinta Radio y Televisión Francesa, enviado a México para cubrir una exposición francesa que tuvo lugar en el Bosque de Chapultepec.

Según Vargas Llosa, Carlos Fuentes fue el segundo escritor mexicano a quien conoció en persona, toda vez que el primero fue José Emilio Pacheco.

“Desde entonces nos vimos innumerables veces y en decenas de lugares. En su caso el talento literario era inseparable del encanto personal; era apuesto, culto, alegre, ameno, divertido, políglota y había viajado por todo el mundo, donde hizo amigos y famosos por doquier”, dijo.

Subrayó que al igual que José Donoso, Jorge Luis Borges y Octavio Paz, Carlos Fuentes leyó vorazmente la mejor literatura de su tiempo, escribió ensayos iluminadores sobre los aportes más señalados de sus modelos literarios y aprovechó sus enseñanzas de manera creativa, adaptándolas a mundo y a su personalidad.

“Por eso su obra, a la vez de una inmersión constante en la problemática de su país, es un testimonio excepcionalmente elocuente sobre las modas literarias, corrientes estéticas, escuelas de pensamiento, ideologías y filosofías, desplantes y espectáculos que poblaron la cultura de su tiempo”, expresó.

Cabe mencionar que el jurado, conformado por escritores y académicos José Manuel Blecua, Marcos Martos Carrera, Jaime Labastida, Darío Jaramillo Agudelo, Gonzalo Celorio, Ignacio Padilla y Eduardo Casar, otorgaron la primera edición del citado premio a Vargas Llosa “por la contribución que desde el español ha hecho para el enriquecimiento del patrimonio de la humanidad”.